Crepúsculo al descubierto...!!!

Hace un tiempo en mi ciudad tuvimos racionamiento de luz en horarios puntuales, las razones no vienen al caso ni las causas, ni las consecuencias,  ni los remedios, que si me pongo a hablar de eso no acabo y no es divertido que es la razón de mi articulo de hoy, pero una de las consecuencias de este racionamiento de luz que como dije era a horarios puntuales, pero racionamiento venezolano al fin, cuando hablamos de un ratito no extendemos para todo el día.

Mi racionamiento tocaba  de 2 de la tarde a 6 de la tarde un día si y otro no, pues era de 2 a 8 un día si y otro, frecuentemente, también, con lo cual y victima del progreso, habitante de un piso 8, con cocina electrica, teléfono y bombeo de agua eléctrico tambien, me quedaban pocas cosas por hacer y decidí retomar actividades que no fueran eléctricas y que tenia postergadas desde hace mucho tiempo, una exposición de bisutería, terminar de enhebrar cuentas para collares y esas cosas, hacerme pedicura, poner al día mis recetarios leer… leer y leer..

 Que sacrificio jajajaja y que buena excusa la de horas y horas muertas, pues decidí también leer la saga de crepúsculo, mi hija la había leído y había quedado encantada pero de eso ya había pasado mucho tiempo,

ella había leído los 4 libros por Internet antes que las editoriales de aquí los sacaran a la luz y me hablaba maravillas, pero como es joven y aun tiene la esperanza de encontrarse un Edward Cullen malparado por ahí y echarle mano…

Bueno en poco mas de quince días me leí toda la saga, 3 kilos de vampiros y licántropos que al final no eran licántropos si no otra raza de hombres lobos muy mona y apuesta, me gusto, no tanto para enamorarme de Edward Cullen, ni en modo alguno querer emular a la díscola de Bella Swan, a mi modo de ver mas pizpireta que Candy Candy pero si como para tener de cerca un hombre lobo de esos… ufales… el mas chiquito media 2 metros de puro músculo y nervios y no envejecían mas de los 25 años y cambiaban de ser según su gusto nada de aullar a la luna llena ni nada, todo eso esta pasado de moda... En fin…

La película se estrenara el día 2 de julio aquí en Venezuela, todas las adolescentes andan con entradas en mano y suspirando porque pasen los días rápido, mi hija se sube por las paredes ayudada de las uñas porque ella jura y promete que Eduard Cullen saldrá de la pantalla para caer rendido a sus pies, quien sabe todo es posible en las mentes de las jovencitas y no estoy yo por la labor de sacarla de su ensoñación ya bastantes problemas tiene la vida real como para quebrarles los sueños a una jovencita con piedras de realidades aunque a mi, el señorito Robert Patison me parezca mas feo que un tiroteo en un ascensor :S pero para gustos se hicieron los colores.

En estas estaba cuando ohhhh sorpresa leyendo la prensa de ayer me encontré con este artículo, que nos cuenta como será el final de crepúsculo, en lenguaje venezolano decimos: Que nunca falta un pajúo que nos cuente el final, pero vale la pena enterarse de éste, no vaya a ser que vayamos con ilusión al cine para salir decepcionados.. Porque a como esta una entrada, mas las palomitas y todo eso uffff gran favor que nos hizo la revista Dominical, al sacar a relucir el guión que dejo abandonado en un pub, alguien del elenco, según, bien descuidado y ….j%%%&/mg 3456n&%&?/

Amen .

Afrodita.

Crepúsculo al descubierto...!!!

Así como ocurrió con el libreto del final de Harry Potter, recientemente el grupo de guionistas de la última parte de "Crepúsculo" (cuya tercera entrega se proyecta en el país esta semana) dejó abandonado en una cantina el manuscrito de 118 páginas donde se revela el desenlace de esta epopeya vampírica contemporánea.

A las pocas horas, ya el material circulaba por Internet, contratiempo ante el que la escritora Stephenie Meyer comentó al New York Times que no ahorraría esfuerzos hasta dar con los responsables. Como uno no es escaparate de nadie, reproducimos en estas líneas la escena final; así que si usted es fan de esta odisea plena de vampiros lánguidos, papeaos hombres lobo y -según se desprende del guión profanado- demás bichos legendarios del séptimo arte, detenga aquí la lectura en aras de mantener intacto el ensueño romántico de la saga.

Cocina llena de humo de cigarro. Varias latas de cerveza tiradas en el piso. Se observa a Edward, Frankestein, La Momia y al Hombre Lobo sentados alrededor de la mesa improvisada rápidamente para un partido de dominó:

- Edward: Panales, ¡chola que ahorita llega la cuaima!

- La Momia: Ay, papá, tas´ sometío. ¡Qué vergüenza para el gremio!

- Edward: No es para menos. Es que el oficio ha cambiado mucho últimamente y lo de aterrorizar se pone cada vez más dificultoso.

- La Momia: ¿Y eso? ¿Por Blade? ¿Buffy la cazavampiros? ¿Van Helsing?

- Hombre Lobo: No, camaradas, es el malandraje desatado. Ya uno no puede salir tranquilamente a aullar en las noches de Luna Llena, ni siquiera en las de Luna Nueva, creciente o menguante, porque igual sales atracado. Me da un susto.

- Frankestein: Pero termina de decir, Edward… ¿cómo haces para que el cabello te quede así? ¿Te lo secas con secador o con plancha? Y esos reflejos… ¿son naturales o te hiciste las mechas?

- Edward: El secreto es una mezcla de acondicionador con aceite de jojoba, baba de caracol y…

Edward no ha concluido su disertación cosmetológica cuando un fuerte portazo se escucha desde la otra habitación. Bella entra a la cocina. Con gesto de repugnancia ante aquel zaperoco:

- Bella: ¡Qué bonito, no! Sinceramente. Una no se puede descuidar porque, no sólo te me gastas todo el protector labial, sino que me llenas la casa de amigotes.

- Edward: Sólo pasaron a saludar antes de recalar donde El Fantasma de la Ópera.

- Bella: Y tú… (dándole un coscorrón al Hombre Lobo) ¡Mira el pelero que me has regado por el piso!

- Hombre Lobo: Eso no me decías antes…

- Bella: Ni me acuerdes ¡Es que una tiene un tino para los hombres! No me podía conseguir a uno normalito ¡Nooooooooo! Sino que, de safrica, vengo a empiernarme con un vampiro y, para salir del despecho, con un licántropo. Puras joyitas.

- Edward (en tono conciliador): Mi ciela, no me hagas pasar la pena. Por cierto… ¿Me trajiste las morcillas que te pedí para cenar?

- Bella: Y con qué, si en todo el santo día tú no mueves ni un colmillo para traer un kilo de venado, man que sea un litrico de leche así sea de esos de PDVAL ¡Chupasangre!

- Hombre Lobo (propinándole un leve codazo a La Momia): De la que me salvé…

- Bella: En definitiva ¡Calabaza y cada quien para su casa! Me voy a ver la novela y, cuando regrese, no quiero ni una venda, ni una cicatriz, tornillo o gota de sangre en la cocina ¿Me entendieron?

- Los bichos legendarios (al unísono): ¡Sí, señora!

- Frankenstein (al oído de La Momia): La propia Alien.

CÁSTOR E. CARMONA

Dominical / Crónicas / Crepúsculo al descubierto

La ilustración es de Weil.