Desnuda entre las sábanas
entregada al momento,
te recuerdo... te beso;
tu sabor es rocío de madrugada,
Te acaricio; tu cuerpo me desquicia,
los beso con pasión no contenida.
Me pierdo en ti, en tus brazos y cuello.
Tus piernas me atrapan;
naufrago en el amor nuestro, muy nuestro.
Me interno en tus humedades,
tus ternuras, mis delirios y miradas.
Recorro tu piel de terciopelo
centímetro a centímetro,
inhalo de tus cabellos esponjosos
un aroma indescifrablemente
excitante e incitante,
que mueve al amor.
1 comentario:
Pues si, hace mucho calor.
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